viernes, 6 de noviembre de 2009

JUGAR LA RACHA (BUENA) "PLAYING A RUSH"

Una buena racha es cuando recibes muchas manos ganadores en un lapso corto de tiempo. Esta generalmente aceptado por la mayoría de los jugadores que es el momento de aprovecharse de la situación cambiando su estilo de juego.
Sin embargo se ve con frecuencia a muchos de ellos devolver parte o todas sus ganancias en el proceso. Se creen invencibles, juegan demasiadas manos y, cuando vuelven a poner los pies en la Tierra, es demasiado tarde. ESTAN LIMPIOS.Antes de explicar como se debe “jugar en racha”, veamos las causas que la provocan:
La suerte que acompaña buenas jugadas no está distribuida equitativamente. Si algún evento tiende a ocurrir 1 vez de 10 en promedio, no quiere decir que se producirá con este ritmo. Puede que no se realice en 50 ó 100 ocasiones y que de repente ocurra 6 ó más veces en 20.
Por ejemplo en Hold’em la estadística dice que recibes A-A una vez de cada 221 manos, pero seguro te ha ocurrido que pasas una semana sin verlo y también te habrán llegado 2 veces seguidas, ó 3 u 4 en 20 distribuciones de cartas.
Otro ejemplo, estás a punto de cerrar un color 1 vez de 3 pero te habrás puesto furioso cuando no lo has completado en 2 ó 3 sesiones, pero en la misma sesion hiciste color las 5 veces que lo buscaste.
De estas variantes en el cumplimiento de las probabilidades vienen las buenas o malas rachas.
Todos tendemos a recordar las sesiones en las cuales tuvimos mucha “buena suerte” o “mala suerte”. En poker nunca puedes saber por adelantado el desarrollo que tomará la jugada hasta que te levantes. No hay ninguna razón en absoluto que define si todo va a ser bueno, malo, o lleno de altos y bajos.

La ciencia dice que las teorías de las “rachas” o de que “tiene que cambiar” no tienen ningún mérito o valor. Sin embargo la mayoría de los jugadores son supersticiosos o aguizoteros, no se preocupan de las ciencias o de las matemáticas, están convencidos que este día de suerte es debido a unas fuerzas místicas que controlan el destino.

¿Cómo reaccionan los oponentes que se enfrentan a un jugador en racha?
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Algunos se comportan como si los dioses del poker estuvieran del lado del suertudo y evitan jugar contra él. Por lo tanto la racha hace que amarren su juego.

* La reacción opuesta se nota en otros adversarios: “Este muchacho las está pegando todas ahora pero ha gastado toda su suerte está listo para una dura caída”. Estos entran en muchos pots con el de la racha para aprovecharse de su esperada baja de forma, le dan mucha acción.

* Y hay la reacción analítica, de los jugadores sólidos: “Este jugador(a) está en una buena racha y lo sabe. Es probable que juegue muchas más manos de las que debiera y hay más posibilidades que de costumbre para agarrarlo con una mano de fuerza menor a lo que sus apuestas dejan suponer. Puedo pescarlo en una de éstas y sacarle una buena tajada de sus fichas”. Esa debería ser la actitud cuando te encuentras con un jugador en racha en tu mesa, cabeza fría, posibles grandes ganancias.

Como lo ves una racha provoca reacciones variadas en los componentes de la jugada pero, a menos que haya muchos jugadores conservadores en la mesa, la tendencia es que el que está de suerte va a tener mucha más acción que de costumbre.
Por lo tanto, cuando estás en racha, debes tomar tus decisiones basándote en el aspecto psicológico del momento, no en la expectativa de que tu buena suerte no tiene fin.
No hay nada malo en ver más flops de los que haces usualmente mientras no te cueste mucho entrar en el pot y que los “implied odds” (ganancias futuras) son buenos. Pero no te pases de listo, tu posición será más importante que nunca. Te permitirá usar el temor que te tienen tus rivales y evitar las trampas que te tenderán. Si subes más a menudo de lo habitual en tu racha hazlo siempre cuando estás en las últimas posiciones. Es bueno ser más activo que de costumbre pero debes guardar una mente fría y calculadora para sacar ventaja de tu estado de gracia y no devolver todas tus ganancias.
Estás en posición de fuerza, a pesar de que la mayoría de tus adversarios te quieran mandar a la lona tienes la ventaja sobre ellos. Castígales duramente con tus buenas manos y bota las marginales cuando encuentras resistencia. Nada le daría más placer a alguno de tus rivales que ser el que acaba con tu racha.